El siguiente artículo forma parte de la serie de publicaciones sobre Perspectivas GovTech, escritas por los fellows del programa GovTech LATAM. Las opiniones y puntos de vista expresados en este contenido corresponden únicamente al autor y no representan necesariamente la posición del IE PublicTech Lab ni de BID Lab. El propósito de estas publicaciones es fomentar el debate y la reflexión en torno al ecosistema GovTech en América Latina. Cualquier error u omisión es responsabilidad exclusiva del autor.
Autora: Cristina Martínez Pinto - Founder & CEO en PIT Policy Lab
Ante la actual prevalencia de tecnologías emergentes integrándose en el día a día de las personas, los gobiernos buscan desarrollar e implementar soluciones digitales innovadoras a fin de eficientar sus procesos y mejorar los servicios públicos. Sin embargo, se enfrentan a una serie de retos para lograr este cometido: a) la falta de recursos humanos y financieros que requieren dichos proyectos, b) marcos regulatorios rígidos que desincentivan la innovación pública, y c) desarticulación y desconocimiento del ecosistema tecnológico emprendedor local en cuya proveeduría de servicios pudieran apoyarse.
En este sentido, GovTech como concepto y modelo de gobernanza, plantea un cambio de paradigma en el que las personas emprendedoras desarrolladoras de tecnología juegan un papel clave, trabajando con gobiernos en el fortalecimiento de sus capacidades de uso de tecnologías digitales y datos, a través de un esquema que les permite ofertar sus servicios y ser partícipes de la resolución de problemas públicos en condiciones de competitividad.
En el plano internacional, iniciativas como el Fellowship del programa GovTech Latam de BID Lab precisamente destacan la importancia de dar a conocer buenas prácticas del ecosistema a nivel regional, reuniendo a personas funcionarias gubernamentales, innovadoras tecnológicas y expertas en políticas públicas para impulsar a la comunidad de práctica. Como GovTech Latam Fellow de la cohorte inaugural, tengo la oportunidad de contribuir a la divulgación sobre el tema, compartiendo dos ejemplos de México. El primero enfocado en la formación de capacidades digitales de municipios y el fomento a la colaboración con startups de tecnología. El segundo basado en la experiencia de un emprendimiento de base tecnológica que está incidiendo positivamente en la recolección de basura en Jalisco.
PIT Policy Lab: Transformación Digital para Gobiernos Municipales
En 2023, PIT Policy Lab, laboratorio latinoamericano para el diseño de políticas públicas y modelos de gobernanza de tecnología, en alianza con la Embajada Británica en México, desarrolló un programa de evangelización GovTech centrado en la capacitación y adopción de mejores prácticas en digitalización, en donde se resaltaron experiencias del Reino Unido. En el marco del proyecto, se llevaron a cabo seminarios virtuales dirigidos a representantes de 30 municipios, una mesa redonda con personas expertas del ecosistema nacional, una visita de trabajo al Reino Unido conformada por una delegación de personas funcionarias públicas del ámbito local y la publicación de una Guía introductoria de Transformación Digital a disposición de gobiernos subnacionales.
Este programa se centró en mostrar casos de uso exitosos de GovTech y en resaltar las oportunidades económicas que representa este mercado. Además, sentó las bases para fomentar colaboraciones público-privadas enfocadas en aprovechar la tecnología desde una perspectiva de interés público.
Blau: Digitalizando la gestión municipal de la basura
Por su parte, la startup mexicana Blau, desarrolló una aplicación innovadora que permite digitalizar y unificar las operaciones de recolección y manejo de residuos sólidos, monitoreando en tiempo real indicadores de trazabilidad, generación de residuos, cumplimiento de metas ambientales y eficiencia. Trabajaron con el Ayuntamiento de Guadalajara, Jalisco en la colocación de sensores de 180 contenedores de residuos, eficientando la operación de recolección. Entre los principales resultados reportados destacan un incremento del 30% en los servicios completados por las y los choferes y la generación de información valiosa para realizar la cobranza e informes automáticos en manejo de residuos.
Es importante destacar que la solución tecnológica que Blau ofrece responde a una serie de retos compartidos en este sector: la documentación se realiza en papel y es manual, no hay trazabilidad ni claridad en la cobranza de servicios, los comprobantes o manifiestos mandatados por la ley no se entregan en tiempo y forma y existen ineficiencias, fraudes e incidencias en la operación causando pérdidas millonarias. En este sentido, la propuesta de valor de Blau reside en la digitalización de las operaciones y en la emisión de manifiestos digitales en tiempo real, a la vez que contribuye al cumplimiento del gobierno con quien se colabora con la legislación ambiental.
¿Qué aprendimos?
En conversación con Jesús Rayón, Fundador y Director de Blau, coincidimos en que el camino hacia la digitalización de los gobiernos locales y los servicios públicos es complejo y demanda un acompañamiento cercano. Es fundamental desmitificar las creencias en torno a las tecnologías emergentes, contar con el apoyo de liderazgos de alto nivel, abrirse a metodologías de innovación y adoptar herramientas digitales, sin perder de vista que la principal persona beneficiaria es la ciudadanía. Todo esto debe ir de la mano de un marco normativo que fomente condiciones de competencia justa y permita la participación de micro, pequeñas y medianas empresas tecnológicas en licitaciones públicas.
Asimismo, ambas experiencias pusieron de manifiesto la necesidad de contar con recursos humanos especializados en las áreas clave, así como la importancia de la colaboración multiactor y multidisciplinaria. Ambos proyectos demuestran el enorme potencial de GovTech para transformar las operaciones del sector público y ofrecer respuestas ágiles a las necesidades de la ciudadanía, tanto en México como en nuestra región.